Peli y manta: El consumo ético

Publicado el 30 Enero 2020 en la categoría Cultura | Sé el primero en comentar

En entradas anteriores hemos hablado en Embarrados del consumo ético, y hoy en concreto os queremos hablar de la moda rápida y por qué es necesario dejar de comprarla. Hacer esto es difícil, porque hay que abstraerse de la continua invitación a consumir que se realiza en nuestra cultura actual, y además hay que buscar tiendas cuyos materiales sean ecológicos y sus prácticas empresariales (sobre todo el trato a sus trabajadores y productores) sean éticos.

¿Por qué en Embarrados nos importa este tema?

Por varias razones. En primer lugar, porque las personas que producen los materiales y cosen la ropa que consumimos viven en países empobrecidos y trabajan en condiciones peligrosas e indignas, normalmente por unos sueldos ínfimos que sin embargo aceptan porque no tienen muchas más opciones. Esta es una de las técnicas que las empresas de moda rápida utilizan para abaratar el coste de su producto: no pagar lo que vale el material y la mano de obra que emplean.

En segundo lugar, por una cuestión medioambiental. El agua y la energía que se consumen para producir la cantidad de materia prima necesaria para fabricar toda esa ropa impacta muy negativamente en el planeta, causando polución en el agua, en la tierra y en la atmósfera y contribuyendo al efecto invernadero. Además, puesto que la producción de estas prendas se tiene que hacer en países fuera de Europa, donde la ley permita las condiciones de las que hablábamos antes, la distancia desde el punto de producción al punto de venta es muy grande y su transporte contamina mucho más que si se produjesen localmente.

Por último, esta moda rápida tiene muy poca calidad -otra forma de abaratar su coste-, por lo que normalmente se usa durante muy poco tiempo y se tira, produciendo una cantidad ingente de basura que tarda décadas en degradarse. Según Greenpeace, entre un 6 y un 8% de nuestra basura doméstica es ropa: el mismo porcentaje que de envases.

Como ya os hemos contado en otras ocasiones, todos sufrimos debido a la emergencia climática, pero serán los países empobrecidos los que experimenten sus consecuencias antes y de forma más severa, habiendo sido los que menos contribuyen a las causas del calentamiento global. Por nuestra cercanía con Bolivia y Burundi, dos países que sufrirán la crisis climática de forma importante, pero también por nuestra conciencia de que solo juntos podemos hacer un mundo más justo, y para ello es fundamental solidarizarse con todos los que sufren, creemos que debemos reaccionar a esta crisis humanitaria y climática.

Esto es solo un resumen muy rápido de por qué en Embarrados queremos reducir nuestra huella ecológica también a través de la ropa que compramos, gastamos y tiramos. En el Peli y manta de enero, te recomendamos un documental para que tú también sigas aprendiendo sobre este tema: El precio de la moda.

Sin embargo, no queremos dejarte con mal sabor de boca, sino ayudarte a que tu forma de consumir sea más respetuosa con los trabajadores y con el planeta. Una de nuestras embarradas más jóvenes, Teresa, que lleva mucho tiempo investigando el campo de la moda sostenible, nos anima a no quedarnos en el derrotismo y a actuar, utilizando el poder que tenemos los consumidores para decirle a estas empresas qué queremos y qué no. ¿Cómo? Pues reduciendo drásticamente nuestro consumo y sobre todo, comprando ropa de segunda mano. De esta manera, podemos adquirir prendas para cuya fabricación no se han consumido recursos naturales, puesto que ya existían, y además no apoyamos económicamente a las empresas de moda rápida.

También puedes ver este vídeo corto, en el que hay más sugerencias para comprar de una manera diferente:

 

Continúa informándote, comparte y ¡seguimos embarrándonos!